Tierno Galvan
Existen momentos en los que los usuarios de Mac pueden encontrarse con el temido problema de que su aparato se bloquee o deje de funcionar. Este tipo de circunstancia puede resultar frustrante, pero no necesariamente significa que se haya perdido el sistema o los datos. En este artículo, te detallamos cómo resolver un Mac congelado de manera gradual sin sacrificar datos relevantes.
1. Identifica la Causa del Problema
Un Mac puede congelarse por varias razones:
- Sobrecarga de procesos: Tener demasiadas aplicaciones abiertas al mismo tiempo puede saturar la memoria RAM.
- Errores de software: Programas corruptos o incompatibles pueden causar bloqueos.
- Actualizaciones pendientes: Usar versiones desactualizadas del sistema operativo o de apps puede generar inestabilidad.
2. Fuerza el Cierre de Aplicaciones Problemáticas
Si tu Mac está parcialmente operativo, pero una aplicación específica no responde, sigue estos pasos:
- Abre el menú Forzar Salida: Presiona
Cmd + Option + Esc. - Selecciona la app problemática: Elige la aplicación que no responde y haz clic en «Forzar salida».
- Reinicia la app: Si necesitas usarla, ábrela nuevamente después de forzar su cierre.
3. Reinicia tu Mac
Si todo el sistema está congelado y no puedes interactuar con él, un reinicio suele ser la solución más rápida:
- Usa el botón de encendido: Mantén presionado el botón de encendido hasta que el Mac se apague.
- Espera unos segundos: Asegúrate de que el sistema se enfríe antes de encenderlo nuevamente.
⚠ Nota importante: Forzar el apagado puede causar pérdida de datos en procesos no guardados, por lo que es importante realizar copias de seguridad regularmente.
4. Inicia en Modo Seguro
El Modo Seguro te permite cargar solo los recursos mínimos del sistema, ideal para solucionar problemas más graves.
- Apaga tu Mac.
- Inicia el Modo Seguro: Mantén presionada la tecla
Shiftmientras enciendes tu Mac. - Comprueba el funcionamiento: Si el Mac funciona correctamente en este modo, desinstala aplicaciones recientes o revisa la salud del disco con Utilidad de Discos.
5. Repara el Disco con Utilidad de Discos
Un disco duro dañado puede ser la raíz del problema.
- Accede al modo Recuperación: Reinicia tu Mac y mantén presionado
Cmd + R. - Abre Utilidad de Discos: Selecciona tu disco principal y haz clic en «Primera Ayuda».
- Sigue las instrucciones: Si encuentra errores, Utilidad de Discos intentará repararlos automáticamente.
6. Actualiza el Software
Una vez que recuperes el control, asegúrate de que macOS y todas las aplicaciones estén actualizadas.
- Ve a Preferencias del Sistema: Haz clic en «Actualización de software».
- Instala las actualizaciones pendientes: Esto puede prevenir futuros congelamientos.
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