Una rápida introducción a los discos duros internos
La gran mayoría de los Mac domésticos tienen discos duros mecánicos (en lugar de unidades SSD basadas en chips) en su interior. Sin un ordenador u otra carcasa que los rodee, estos discos duros se llaman «discos duros internos». Son pequeñas cajas de metal parecidas a los antiguos tocadiscos, con uno o más discos giratorios («platos») a los que se accede mediante un «cabezal de lectura/escritura» (mostrado arriba). No todos los discos duros son iguales y no están hechos para durar eternamente: los buenos discos suelen durar unos tres años de uso muy activo, y los mejores, cinco. Un uso ligero alarga su vida.
